Durante el mes de agosto se produce un fenómeno astronómico denominado las "Perseidas", una lluvia de meteoros muy fácil de ver en todo el hemisferio norte. El origen de este nombre porcede de la constelación donde se producen, Perseus o Perseo, un héroe mitológico del mismo nombre, famoso por decapitar a la terrible Medusa y liberar a su amada Andrómeda. Tras su muerte, fue convertido en estrella por la diosa Atenea para recordar su hazaña y se suele representar como un joven guerrero armado.
Constelación de Perseo en la Uranographia by Johannes Hevelius, 1690.
¿Pero de dónde viene el mito?
Perseo era un semidios, hijo de Zeus y
Danae que fue considerado desde siempre como un modelo de fuerza, juventud y astucia, gracias a la cual pudo vencer al Mal representado en Medusa, cuya mirada era capaz de petrificar a cualquiera que osara acercarse.
El mito de Perseo ha tenido múltiples representaciones iconográficas desde la Antigüedad, así podemos verlo en el frontón del templo griego de Selinute, s.VI a.C en Sicilia...
o en los frescos de la Villa San Marcos en Pompeya
Sin embargo, una de las más famosas representaciones es la realizada a mitad del siglo XVI por el escultor y orfébre italiano, Benvenuto Cellini.
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| Perseo con la cabeza de Medusa. Loggia de los Lanzi, Florencia 1545-1554 |
Esta escultura en bronce realizada a la cera perdida es considerada una de los mejores ejemplos del Manierismo italiano. Fue el encargo de Cósimo I de Médicis para conmemorar su toma de posesión como Duce de la ciudad de Florencia. Tras
su inaguración en la Loggia de los Lanzi, en la Piaza de la Signoria
donde sigue colocada en la actualidad, se convierte en una advertencia
para los enemigos de la poderosa dinastía que representaba.
El modelo seguido por Cellini era el habitual, un joven armado levantando la cabeza de Medusa en una mano y en la otra, portando su espada.Todos los elementos que identifican al personaje mitológico están representados al detalle: el casco alado que otorga la invisibilidad regalo de Hades con el que puede ver y no ser visto; la espada indestructible llamada Harpe y las sandalias aladas regalo de Hermes, así como el escudo bruñido como un espejo regalo de Atenea con el que evitó la mirada petrificante de Medusa.
El modelo seguido por Cellini era el habitual, un joven armado levantando la cabeza de Medusa en una mano y en la otra, portando su espada.Todos los elementos que identifican al personaje mitológico están representados al detalle: el casco alado que otorga la invisibilidad regalo de Hades con el que puede ver y no ser visto; la espada indestructible llamada Harpe y las sandalias aladas regalo de Hermes, así como el escudo bruñido como un espejo regalo de Atenea con el que evitó la mirada petrificante de Medusa.
Hoy
en día, la espada que porta en la mano es una
copia en bronce de 1947, la original muy estropeada se encuentra en la
Galleria de los Uffizi.
Pero la técnica utilizada para construir esta figura, en bronce de una sola pieza, estaba ya olvidada en la Italia del siglo
XVI, por lo que el artista tuvo que realizar varios ensayos y bocetos
preparatorios.
En un análisis profundo de la obra, se ha comprobado que el fundido de la figura principal no es perfecto y de ello sabemos por el propio artista que cuenta en su "Autobiografía" como esta escultura fue sobre todo un desafío técnico. Tuvo muchos problemas durante su fundición y a punto estuvo de destruirse siendo necesario añadir varias piezas de su vajilla de metal para conseguir la consistencia adecuada en el horno.
Para valorar el esfuerzo realizado por el artista, hay que comprender que la técnica de la cera perdida implicaba que debía trabajarse primero la figura en cera con la máxima perfección, y después se cubría con una capa de yeso o barro para introducirla en un horno subterráneo. Se colocaban varios respiraderos para dejar salir la cera y un orificio en la parte superior por donde verter el bronce derretido, pero esto suponía un alto riesgo de fractura durante la cocción. Al final del proceso, tenía que repasarse la pieza con un cincel para marcar los detalles y realizar el bruñido.
En un análisis profundo de la obra, se ha comprobado que el fundido de la figura principal no es perfecto y de ello sabemos por el propio artista que cuenta en su "Autobiografía" como esta escultura fue sobre todo un desafío técnico. Tuvo muchos problemas durante su fundición y a punto estuvo de destruirse siendo necesario añadir varias piezas de su vajilla de metal para conseguir la consistencia adecuada en el horno.
Para valorar el esfuerzo realizado por el artista, hay que comprender que la técnica de la cera perdida implicaba que debía trabajarse primero la figura en cera con la máxima perfección, y después se cubría con una capa de yeso o barro para introducirla en un horno subterráneo. Se colocaban varios respiraderos para dejar salir la cera y un orificio en la parte superior por donde verter el bronce derretido, pero esto suponía un alto riesgo de fractura durante la cocción. Al final del proceso, tenía que repasarse la pieza con un cincel para marcar los detalles y realizar el bruñido.
Boceto en cera
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Boceto en bronce
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Perseo aparece ante nuestros ojos pisoteando el cuerpo sangrante y contorsionado de la temible Medusa. Coloca la figura sobre una base rectangular formada por una especie de almohada, que sabemos se inspira en el grupo de Judith y Holofernes de Donatello. Bajo ella, creó un pedestal que en sí mismo ya es una obra de arte de la orfebrería, compuesto de pequeñas figuras de bronce en hornacinas y piezas de mármol con la representación de divinidades como Danae, Hermes, Júpiter y Andrómeda, todas ellas relacionadas con el mito.
En cuanto a la composición, la
figura del joven en bulto redondo presenta un fuerte contrapposto,
abriendo múltiples líneas en entorno a ella gracias a la posición de los
brazos hacia delante y la cadera inclinada. Esto supuso una gran
dificultad para el artista pero incluye así los ángulos de visión que
consideraba imprescindibles.
El modelado del torso y el rostro, repite el trabajo monumental de la escultura clasicista marcado por la serenidad de las formas.
Pero en otros múltiples
detalles, podemos ver la gran técnica como orfébre que
poseía Cellini, por ejemplo en el tratamiento de los cabellos a modo de
"trépano", en el casco alado y en las hornacinas del pedestal.
Existen
algunas curiosidades en esta escultura que podemos apreciar, por
ejemplo, en la nuca de la estatua se observa un autorretrato del
propio autor, que serviría como firma imborrable en su obra y prueba de
su virtuosismo. Para que no haya dudas, también firma la banda que cubre el troso de la figura.
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| Casco del Perseo con la el rosto de Cellini y grabado de la época |
Los críticos de arte consideran que esta obra escultórica rompe con la tradición clásica de la armonía de las formas vista en años anteriores en Italia, y supone un paso decisivo hacia un movimiento nuevo: el Manierismo, que caracterizará el arte desde finales del siglo XVI y que tuvo gran influencia en toda Europa.
BIBLIOGRAFÍA
Juan Antonio Ramírez y VV.AA "Historia del Arte" Editorial SM
www.iconos.it
www.mitosyleyendascr.com
Imágenes: Wikipedia Commons
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